Magia negra.

Creé el muñeco con absoluto detalle, cuidando que representara las formas y las texturas. El relleno fue entrando poco a poca hasta el tope. Agregué lo demás y lo cosí.
Día a día lo miraba, lo tomaba entre mis manos y, lleno de odio, le clavaba las puntas de los alfileres, le quemaba los ojos, lo retorcía. Día a día fui dedicando más tiempo al muñeco.
Estaba seguro de su efectividad. Yo mismo había robado, mientras dormías, el mechón de pelo que ahora era el corazón del mágico juguete.
Llegué de a poco a no dormir, a pasarme la noche entera mirando al macabro objeto mientras él me miraba a mí. Llegué a repasar miles de veces la lista de recuerdos que me había llevado a construir esa cosa que, de a poco, me fue robando el alma.
Pensé en incendiarlo, en ahogarlo, en enterrarlo donde descansaban los restos de mi último perro.
Cierta vez, cansado de él, lo tomé por el cuello, abrí la ventana y al tomar carrera para arrojarlo me vi. El espejo me mostraba mi cara, sucia, lastimada y hambrienta. Miré mis manos y recordé. Hacía meses que no salía de la habitación, el monstruo me había secuestrado. Mi deseo de venganza me terminó convirtiendo en la propia macumba y a vos, a los recuerdos de vos, en los terribles alfileres.

21 comentarios:

  1. Es que a veces hay que pasar página!!
    Besos.

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  2. ...uno es lo que piensa.

    Un beso gigante

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  3. Uff... ¡pero cuanto dolor!

    Dicen que la venganza nunca es buena, mata el alma y la envenena. Tampoco el rencor sirve. Son cosas que alimentan lo malo de uno, lo peor incluso.

    Igual, que coraje al usar magia negra.

    Saludos!

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  4. Si es que nuestros miedos suelen estar en nuestro interior.
    Me gustó.

    Un saludo indio

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  5. Excelente relato Ignacio. Cómo me gustan los cuentos que tocan estas temáticas. Un gualicho que termina siendo inverso, que buena idea! Igual hay cosas encerradas acá que tocan temas mucho más profundos que lo que muestra el relato a simple vista (incluso quedándonos solo con lo superfluo es excelente, de todas formas). Digo, no sólo las ansias de venganza, sino también la obesión, la traslación de personalidad, y, porqué no, la locura.
    Me encantó!
    Cariños!!

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  6. La venganza te llena de angustia y de dolor, hay que dejarla atrás; y pensar en cosas que te llenen el alma como la alegría, la esperanza; pero nunca dejes que el odio se adueñe de tu cuerpo.


    Muy lindo!
    Besos

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  7. Uffff. Ignacio. Impresionante. Da hasta miedo.
    A veces nos obsesionamos por alguna causa y no podemos salir de la habitación.
    Eso es lo peor, cuando no se puede salir de la habitación y mirarte al espejo para ver en qué nos hemos convertido.
    O en qué nos han convertido que esa es otra.
    Lo peor es cuando no se puede salir de la habitación y huir.
    Eso eso es lo peor.
    Gran entrada.
    Profunda, igual que tu muñeco cosido de alfileres.

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  8. Hola he leído tu texto y me ha emocionado su contenido , y su forma de escribirlo , te as secuestrado tú a ti mismo , en tu odio y en tu sentimientos , te as autolexsionado en tu alma .
    Deseo que solo sea un escrito imaginario llevado al post y nada más .
    Un saludo de MA

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  9. El tiempo lo sana todo... menos la locura remanente.

    Me niego a ser un juguete de mi mente.

    Genial como siempre.

    Un abrazo, amigo.

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  10. Me gustó mucho Ignacio. Una especie de cazador cazado, pero en versión macumba. Inversión de roles y final inesperado. Muy bueno! Un abrazo

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  11. Sencillamente me encanta. Al fin y al cabo somos nuestro peor enemigo.
    Un besazo y kuidate, me encanta leerte

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  12. Ufff no paras de asombrarme ,mira que me da miedo leer todo esto y aun asi consigues que te vuelva a leer ...

    Lo cierto es que me encanta la manea de escribir que tienes .

    Un besito Ignacio .

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  13. Lindo texto.
    Sin dudas estas cosas, solo nos oscurecen...

    Si para algo me gustaría ser hombre es para tocar la puerta, de quien tengo atravesado en la garganta y cagarlo a trompadas. Eso si que libera rencores!!!

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  14. Muy buen relato.¿Te fijaste si no te habían cortado un mechón? ja ja.Abrazo.

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  15. muy bueno, muy buen escrito y también atrapa hasta el final
    las venganzas dicen que no son buenas, pero cuando la vengamos y sale bien es como comer un buen entrecort...jajjaja que mala soy

    piano huerfanito

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  16. La venganza te absorbe incluso la razón, que triste sentir de esa forma, pierdes el sentido de la vida, besitos

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  17. Realmente bueno este. Me gustó la conclusión.

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  18. Leyendo los BLOGS interesantes y valiosos he llegado a "tropezarme" fortuitamente con los tuyos. Que humanidad y sensibilidad la que transmites con tus fotogragias de Pobres de nosotros y que bien escribes. Gracias por tu presencia en nuestras vidas. Ahora dejame leerte... Un fuerte abrazo y aunque muchos no te dejan comentarios, estoy segura que muchos si te leen...
    Que la luz del Creador siga iluminando los senderos de tu vida.
    Tu nueva amiga,
    Mariangeles (desde Miami y Lima)

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  19. Que increible relato!! me encantó!!
    Saludos!

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  20. Muy buen relato, el embrujador embrujado. "los recuerdos de vos, en los terribles alfileres", excelente.

    Saludos

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